Hummus de alcachofa.

!Buenas noches cauliflagüers! A estas alturas de la vida ya os habréis dado cuenta de que me flipan los garbanzos, cosa que agradezco, ya que las legumbres son un alimento que lo tiene todo: son nutritivas, saciantes e ideales para dietas, ya que se absorben de forma lenta. Una de mis recetas favoritas es el hummus, ya que es muy sencillo de preparar y es perfecto para acompañar otros platos: como base de una ensalada, para untar en una tostada o para elaborar un buddha bowl. Además, es muy versátil, ya que puedes incluir otros ingredientes de temporada y darle un sabor diferente y especial. En el blog podéis ver varias versiones: de brócoli, mango, guisante, aguacate, remolacha y pimiento asado. No sabría deciros cuál de todos me gusta más, pero es una buena colección para que no os aburráis de comerlo.

Hoy he querido hacer una nueva versión con alcachofa, uno de los ingredientes estrella de esta temporada y que, además, me encanta. Podéis utilizar alcachofas en conserva, pero yo no puedo consumirlas y me gusta más utilizarlas frescas, ya que el sabor varía bastante. Queda riquísimo y muy cremoso, aunque esto depende de la cantidad de líquido y depende de los gustos de cada persona. Os recomiendo mucho probarlo, estoy segura de que os va a encantar.

HUMMUS DE ALCACHOFA

Para dipear

Dificultad: muy fácil

Ingredientes:

  • 200 gr de garbanzos cocidos
  • 100 gr de alcachofas
  • 1 cucharada de tahini
  • 1 cucharadita de comino en polvo
  • Pimienta negra
  • 1 cucharadita de vinagre de manzana
  • Agua de cocer las alcachofas
  • Aceite de oliva y sal al gusto

Procedimiento:

Limpia las alcachofas, retirando las hojas externas hasta llegar a la parte tierna, corta las puntas y pela el tallo. Corta en 6 trozos y cuece en agua con sal (el corazón y algunas hojas para decorar) y un chorrito de vinagre de manzana. Escurre y reserva.

Aclara los garbanzos, escurre y reserva algunos para decorar. Vierte en el vaso de la batidora junto con las alcachofas, el tahini, el vinagre y las especias. Tritura, añadiendo de poco a poco el agua de cocción de las alcachofas, hasta obtener la textura que te guste.

Vierte en un cuenco y decora con unos garbanzos, las hojas de alcachofa y un chorrito de aceite de oliva.

Sugerencias: acompaña de picos, crudités o crackers.

Deja un comentario