!Buenas tardes corazones! Últimamente estoy a tope con las recetas de remolacha y eso que no me apasiona demasiado… Pero os aseguro que la receta de hoy os va a gustar porque tiene un sabor increíble y, lo mejor de todo, es que no sabe a remolacha. ¿Os acordáis de las bolitas de remolacha, piña y coco que compartí hace un mes? Pues esta es una versión que está aún más rica. Y no lo digo yo, lo dicen mis catadoras oficiales.
En este caso utilizo harina de algarroba como sustituto del cacao, así que podéis reemplazarlo perfectamente. Además, no llevan azúcar, ya que el dulzor lo aportan los arándanos. La textura queda increíble y, a medida que pasa el tiempo, se vuelve más densa y el sabor más intenso. Realmente es un bocado perfecto para llevar al trabajo. ¿Os animáis a probarlas?

TRUFAS DE REMOLACHA Y ALGARROBA
Para 8 bolitas
Dificultad: muy fácil
Ingredientes:
- 80 gr de harina de almendras
- 10 gr de harina de algarroba
- 40 gr de puré de remolacha (cocida)
- 20 gr de arándanos
- Harina de algarroba para rebozar.
Procedimiento:
Hidrata los arándanos en un poco de agua templada. Escurre y vierte en el vaso de la batidora junto con la remolacha. Tritura hasta obtener un puré, si necesitas un poco de agua añade lo justo.



Tamiza las harinas y mezcla con la pasta anterior. Debe quedar una masa manipulable, pero no excesivamente húmeda. Reposa en la nevera durante unos 30 minutos para que adquiera consistencia. Haz bolitas y reboza en harina de algarroba.



Sugerencias: te aconsejo dejar reposar unas horas, ya que a medida que pasa el tiempo la textura se vuelve más densa y el sabor es más intenso.
