Donetes de chocolate, fresa y arroz inflado.

Soy golosa por naturaleza, desde mi más tierna infancia. Recuerdo aquellos días de infantil en los que mi madre aparecía con mi tía a la hora del recreo en la verja del colegio y me daba un donut. Era el momento más dulce y especial del día. Recuerdo las bolsas de bollitos de crema (de esos que se compraban al peso) en el armario de la cocina y devorarlos sin miramientos para el desayuno o la merienda. También eran frecuentes durante la víspera de las fiestas del pueblo, por si venía visita. Era difícil resistirse a la tentación con tanta belleza diciendo «cómeme». En mi época de internado me inflé a «pepitos», y eso que no me gusta el chocolate. Pero aquellos bollos me dieron la vida en una de las etapas más difíciles y amargas.

Y, ¿cómo no? El azúcar también fue mi aliada perfecta durante mi estancia en Escocia y mis trabajos de turno de noche. Era llegar a la estación a primera hora de la mañana, de vuelta a casa, y paraba a comprar 1 docena de donuts de azúcar. Una media caía en el camino y, la otra, al despertar antes de volver a trabajar. Y aquí fue donde me di cuenta de que no podía seguir así, ya que al final iba a desarrollar una diabetes. Quien haya intentado quitarse del azúcar estará conmigo en que es una adicción «poco visible» muy difícil de abandonar. Pero, aunque me costó, empecé a reducir el consumo y hoy en día apenas tomo azúcar. Algún bollito o goloseo en ocasiones especiales.

Hoy os traigo un «enreo» bastante sano, que puede ayudaros a calmar el antojo. Elaborado a base de chocolate (mejor si utilizáis el negro puro), puré de fresas (que están de temporada) y arroz inflado con chocolate (éste sin gluten, aunque podéis utilizar otro tipo de cereal).

El resultado es un bocado de puro sabor que os mantendrá con energía hasta la hora de comer o la hora de cenar. Pero cuidado, pueden ser adictivos («y el que avisa no es traidor»).

DONETES DE CHOCOLATE, FRESAS Y ARROZ INFLADO

Para 6 unidades

Dificultad: fácil

Tiempo de elaboración: 1 hora

Ingredientes:

Para la cobertura de chocolate:

  • 100 gr de chocolate blanco
  • 1 cucharadita de aceite de coco
  • 30 gr de chocolate negro puro
  • 1/2 cucharadita de aceite de coco

Para la crema de fresa:

  • 50 gr de puré de fresas (unos 80 gr de fresas frescas)
  • 15 ml de agua
  • 15 gr de azúcar
  • 0,25 gr de agar agar

Para la capa de cereal:

  • 60 gr de arroz inflado con chocolate
  • 1 cucharada de aceite de coco

Procedimiento:

Funde el chocolate al baño María, deja que se atempere un poco y vierte en el molde, cubriendo todos los lados. Lleva al congelador unos minutos. Repite el proceso.

Prepara la crema de fresa: lava las fresas, retira el pedúnculo y tritura con la batidora. Pasa por el chino para eliminar las pepitas. Prepara un almíbar con el azúcar y el agua y disuelve el agar agar. Lleva a ebullición 2 minutos. Mezcla con el puré y deja atemperar. Vierte la crema de fresa y da un golpecito sobre la mesa para que se reparta de manera homogénea. Lleva al congelador.

Derrite el aceite de coco y mezcla con el arroz. Coloca sobre la crema de fresa, presionando un poquito con los dedos y reparte uniformemente. Lleva de nuevo al congelador. Funde el chocolate negro al baño María y vierte una capa sobre las rosquitas, intentando que la superficie quede lisa. Cuida que esté templado (tirando a frío) o el aceite de coco se derretirá (palabrita).

Vuelve a enfriar. Desmolda con cuidado y disfruta.

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