!Buenas coliflagüers! Me encantan los domingos: significan día de familia, de tomar cañas con mis padres, de ir al pueblo y pasar la tarde con mi güeli, que es lo más grande (amor de nieta primogénita). También significan desayunos tardíos, con tiempo y algún que otro capricho. Y eso es lo que hoy os traigo: un capricho delicioso, fresco, delicado, crujiente y cremoso, lo justo de dulce y facilísimo.

Sí, ya sé que me flipo un poco con la piña, pero es una de mis frutas favoritas, así que vais a ver muchas recetas con ella. Por otra parte, la crema de piña fue todo un éxito (la tenéis en anteriores recetas) y es tan fácil y deliciosa, que la haré con frecuencia para diferentes elaboraciones.

Estas tartaletas son una idea perfecta para desayunar, merendar o como postre tras una comida copiosa.

TARTALETAS DE CREMA DE PIÑA

Para 4-5 personas

Dificultad: muy fácil

Tiempo de elaboración: 30 minutos

Ingredientes:

• 1 placa de hojaldre
• Sirope de agave
• 2 rodajas de piña natural
• Una cucharada de aceite de coco (o margarina)

Para la crema de piña:

• 200 ml de bebida vegetal de almendras
• 100 gr de piña natural
• 30 gr de eritritol
• 30 gr de maicena

Procedimiento:

Prepara la crema: disuelve la maicena en un poco de leche fría. Mezcla el resto con la piña y el eritritol y tritura hasta obtener una masa fina (te recomiendo colarla). Lleva a ebullición en un cazo o sartén y agrega la maicena disuelta. Remueve hasta que espese, retira del fuego y vierte en un recipiente. Cubre con film y deja atemperar. Termina de enfriar en el frigo.

Precalienta el horno a 190ºC. Corta el hojaldre con un molde redondo. Necesitarás dos círculos para cada tartaleta (aunque yo he aprovechado el círculo sobrante para hacer otra capa). Deja el círculo de la base entero, al resto tienes que extraerle el centro (con un molde más pequeño). Pega las capas con ayuda de sirope de agave y pincha el fondo con un tenedor para que no se infle (a mí siempre se me leva). Hornea durante unos 15 minutos o hasta que se dore. Deja enfriar.

Con ayuda de unas varillas eléctricas bate la crema de piña. Introduce en una manga pastelera y rellena las tartaletas. Corta unas rodajas de piña fresca y dora en la sartén con un poco de aceite de coco o margarina. Decora la tartaleta y disfruta.