Desde que he aprendido a cocinar la quinoa bien, he empezado a consumirla con más frecuencia. Me encanta su sabor suave, su textura esponjosa y su versatilidad para combinarla con otros ingredientes. Tenéis algunos ejemplos en el blog, como la pizza de quinoa y verduras o los crackers (estos últimos son adictivos, así que luego no digáis que no os avisé 🙂 ).

Hoy os traigo una ensalada donde la base principal es la quinoa y mi legumbre favorita: los garbanzos. Para cocinar la quinoa tenéis que utilizar agua en una proporción 3:1, es decir, tenéis que medir el volumen de quinoa y echar 3 veces esa cantidad de liquido (agua o caldo). El resto de la receta son ingredientes de temporada que le van a dar un toque fresco y colorido.

Como veis es muy sencilla, sana, vegana y sin gluten. En definitiva, apta para todo el mundo, y esto es lo que más me gusta. ¿Qué te parece?

ENSALADA DE QUINOA Y GARBANZOS

Para 4 personas

Dificultad: muy fácil

Ingredientes:

• 200 gr de quinoa cocida (unos 60 gr en seco)
• 3 partes de agua
• 150 gr de garbanzos cocidos
• 50 gr de aceitunas negras sin hueso
• 100 gr de remolacha cocida
• 1 zanahoria grande
• 1 lata de maíz dulce
• 1 aguacate
• El zumo de un limón
• Un chorrito de aceite de oliva
• Sal al gusto

Procedimiento:

Cuece los garbanzos si utilizas la legumbre seca. Ya sabes que tienes que dejarlos en remojo la noche anterior en agua caliente con sal. Escurre, aclara y cuece en la olla rápida. Tardará unos 30 minutos.

Prepara la quinoa. Lávala bien con ayuda de un colador de malla hasta que el agua salga clara. Pon la quinoa en una sartén sin aceite y cocina a fuego mínimo, hasta que quede seca. Añade el agua, lleva a ebullición a fuego alto y una vez que empiece a hervir baja el fuego, cubre con una tapadera y cocina unos 15 minutos (dependerá de la marca). Destapa y comprueba que esté al dente (hinchada y con el anillo característico alrededor) y que ha absorbido el agua. Retira del fuego, deja enfriar y separa los granos con un tenedor.

Prepara el resto de ingredientes: lava, escurre y corta las aceitunas en rodajas; seca la remolacha y córtala en dados pequeños; corta el aguacate en cubos y rocíalo con limón para que no se oxide; ralla la zanahoria; escurre el maíz y elimina el agua con papel absorbente.

En un bol mezcla los garbanzos y la quinoa, sazona al gusto y añade un chorrito de aceite de oliva. Mezcla todo bien. Coloca un molde de emplatar sobre un plato y ve alternando capas con los diferentes ingredientes, presionando un poco para que quede compacto.

Elimina el exceso de líquido que pueda salir por los bordes y retira con cuidado el molde. Listo para servir y disfrutar.