Soy adicta a los garbanzos y a la comida árabe y, si mezclamos ambos, tenemos como resultado el hummus, una de mis comidas favoritas.

Casi siempre hago la receta tradicional, pero la cocina es el lugar para experimentar y probar diferentes sabores. Así que, ¿por qué no mezclarlo con otros ingredientes y ver qué pasa? La primera versión que hice de hummus fue con pimiento asado y creo que hasta el momento es una de mis alternativas favoritas. Ese toque ahumado (con pimientos de casa, eh?), ese colorcito… Se me hace la boca agua sólo de pensarlo.

Hoy te traigo otra versión, utilizando otro ingrediente de temporada: la remolacha. Y créeme, es ideal. Un hummus con un color rosado que no va a dejar indiferente a nadie y ese sabor dulzón que contrasta tan bien con el toque de ajo y zumo de limón.

Anímate a probarlo y disfruta de la mejor manera de comer legumbres en verano.

HUMMUS DE REMOLACHA

Para 4 personas

Dificultad: muy fácil

Tiempo de elaboración: depende de si utilizas los ingredientes ya cocidos o no

Ingredientes:

• 500 gr de garbanzos cocidos
• 200 gr de remolacha cocida
• 2 cucharadas de tahini
• 1 ajo (esto va a tu gusto)
• 1 cucharadita de comino molido
• El zumo de ½ limón
• Sal al gusto
• Semillas de sésamo para decorar.
• Un chorrito de aceite de oliva.

Procedimiento:

Prepara los garbanzos. Si los utilizas comprados, escurre el agua y acláralos un poco. Si los utilizas secos, tienes que cocerlos previamente, escurrir y reservar un poco del agua de la cocción.

Haz lo mismo con la remolacha. Si la utilizas fresca tendrás que cocerla, así que si quieres ahorrar tiempo te aconsejo comprarla ya cocida.

En el vaso de la batidora, vierte todos los ingredientes y tritura hasta obtener una crema homogénea.

Sirve con un chorrito de aceite de oliva y unas semillas de sésamo.

Sugerencias:

Puedes tomarlo con crackers, bastones de zanahoria y otras hortalizas frescas, tostadas,… Con los crackers de quinoa la combinación es perfecta 😉