Una de mis grandes pasiones, además de cocinar, es viajar. Tengo una curiosidad desmedida por descubrir otros lugares, conocer nuevas culturas, compartir con sus gentes y, por supuesto, degustar sus manjares.

No sé si os habéis dado cuenta, pero desde que inicié mis andanzas por este mundo, uno de mis objetivos fue dar a conocer la gastronomía de otros países. De hecho, he intentado compartir un plato exótico cada mes. Así, podéis disfrutar de los sabores especiados de la cocina árabe (hummus, falafel, tabulé) o india (Chole Palak, samosas), el toque picante y fresco de la cocina mexicana (tacos, guacamole), el colorido y exotismo de los platos asiáticos (dumplings, rollitos de primavera). Pero también podéis degustar unas cremosas Jacked Potatoes británicas, una moussaka griega, unos sarmales rumanos o unas galettes francesas.

Hoy os traigo una receta para compartir, ideal para un piscolabis. Se trata de una receta de la cocina griega, cuyo nombre me cuesta recordar: Tirokafteri. Para que nos entendamos, es una crema de queso feta y yogur, dos de los ingredientes frecuentes en los platos griegos. Es una receta muy fácil, que puede serviros de entrante para una cena en estas noches de verano (bueno.. de primavera con tiempo de verano jejeje). Con una textura cremosa y un sabor fuerte, puede convertirse en un placer adictivo. Echa un vistazo…

TIROKAFTERI: CREMA DE QUESO FETA Y YOGUR

Para compartir

Dificultad: muy fácil (nivel principiante)

Tiempo de elaboración: 10 minutos

Ingredientes:

• 200 gr de queso feta
• 50 gr de yogur griego sin azúcar (1 cucharada)
• 1 diente de ajo
• 1 cucharada de aceite de oliva
• 1 cucharada de vinagre de vino blanco
• Pimienta negra al gusto
• 1 cucharadita de orégano seco

Para decorar:

• Pimentón de La Vera (picante)
• Aceitunas negras

Procedimiento:

Trocea el queso y vierte en el vaso de la batidora con el resto de ingredientes, salvo el orégano. Tritura hasta obtener una crema homogénea. Si te resulta muy picante, añade un poco más de yogur.

Agrega el orégano y mezcla con una cuchara. Vierte en el recipiente donde vayas a servir.

Decora con pimentón, aceitunas negras picadas y un poco más de orégano. Puedes servir con pan de pita, bastones de zanahoria o picos.

Sugerencias:

Si no tienes vinagre de vino blanco, utiliza vinagre de manzana.

Está deliciosa para acompañar unas fajitas de pollo (pero no se lo digas a nadie….).