No soy mucho de postres, pero cuando hago algo, casi siempre lo sirvo en cuencos de cristal o en vasitos de barro que guardo de los helados que como. La verdad es que son bastante bonitos para una presentación. Pero, ¿y si hicieras un postre donde puedes comerte el “vaso”? Y eso es lo que te traigo hoy, que más que una receta es una elaboración que puedes utilizar con múltiples ideas y que va a darte un resultado super original y bonito: cestitas de chocolate.

He intentado varias veces hacer esta receta, tanto con globos como con los moldes de silicona de las magdalenas. Os recomiendo la segunda opción, al menos hasta que tengáis cierta práctica. He hecho 3-4 veces las cestitas con globos y he puesto la cocina perdida de chocolate, porque tienes que tener muchísimo cuidado con la temperatura. Así que de momento prefiero utilizar los moldes de silicona, mucho más manejables (aunque también con un resultado más “rústico” jejejej).

Te aconsejo dar varias capas (yo suelo hacer tres), para que tenga un grosor suficiente para que no se rompa al desmoldar (unos 2-3 mm). También podéis hacerlos con los moldes de papel, aunque en este caso os recomiendo que sean de calidad y que utilicéis dos o tres juntos. El resultado es más “fino”, pero cuesta un poco más.Así que aquí os dejo las opciones que tenéis. Ahora elegís cuál os gusta más o probáis todas. Sin más preámbulo, vamos a por la receta. Así que aquí os dejo las opciones que tenéis. Ahora elegís cuál os gusta más o probáis todas. Sin más preámbulo, vamos a por la receta.

CESTITAS DE CHOCOLATE

Para 6 unidades (tamaño magdalena básico).

Dificultad: fácil

Tiempo de elaboración: 50 minutos

Ingredientes:

• 150 gr de chocolate negro puro (80%)

Procedimiento:

Lo primero que vamos a hacer es trocear el chocolate y ponerlo en un bol. Puedes fundirlo al baño María o hacerlo en el microondas. Yo utilizo la segunda opción, con golpes cortos de calor para evitar que se queme. Cuando esté completamente fundido vierte dos cucharadas de chocolate en uno de los moldes y con un pincel de silicona extiéndelo por todas las paredes del molde, intentando cubrir todos los huecos. Si necesitas un poco más de chocolate, añádeselo.

Haz lo mismo con todos los moldes y mételos en el congelador durante 10 minutos. Saca los moldes del frigorífico y repite el proceso de barnizar con chocolate y congelar dos veces más. Cuando estén listos, desmolda con mucho cuidado, despegando el borde por completo y sacando la cestita.

¡Tachán! Ya tienes listas tus cestitas, para servir con lo que más te guste. Anota esta idea, porque la semana que viene compartiré un postre delicioso y voy a utilizarlas. Te doy una pista… 😊