Si me preguntas qué salsa es mi favorita para la carne, sin duda alguna te responderé sin pensar: salsa roquefort o salsa de boletus. Pero hoy os traigo una alternativa que es un placer para los sentidos y que se ha convertido en «the number one»: salsa de naranja. Con una textura más ligera y libre de lácteos, es el acompañante perfecto: una mezcla de sabores agridulces con un toque de orégano.

¿Te animas y me cuentas?

SALSA DE NARANJA

Ingredientes:

• 1 vaso de zumo de naranja (200 ml)
• 1/4 de vaso de agua fría
• 2 cucharadas soperas de azúcar
• 1 cucharadita colmada de maicena
• 1 cucharada de orégano
• 1 pizca de pimienta negra
• 1 pizca de sal

Procedimiento:

En un cazo o sartén pequeña, calienta el azúcar a fuego bajo con un poco de zumo. Cuando empiece a tomar la textura de caramelo, añade el resto del zumo, la sal, la pimienta y el orégano. Cocina un par de minutos.

Disuelve la maicena en el agua fría y añádela a la sartén. Deja que espese sin dejar de remover hasta que esté a tu gusto.

Y disfruta 😉