Moussaka (vegana).

Uno, dos, tres.

Tres han sido los intentos que he hecho antes de lograr este resultado. Y no es porque fuera mi primera vez haciendo moussaka, ya que es uno de mis platos preferidos. Sin embargo, era la primera vez que la hacía utilizando soja. Y claro, ni el sabor es igual, ni mucho menos la textura y la consistencia… Ahora puedo decir que estoy satisfecha y además, el toque de la patata es increíble (no sé por qué nunca he querido incluirla).

La moussaka es un plato típico de la cocina griega, una especie de lasaña elaborada con berenjena y carne de cordero. Pero la receta que os presento es una versión totalmente vegetariana, que utiliza soja texturizada en lugar de carne. Y, de esta forma, continúo con mi reto de recetas versionadas.

Este plato requiere de tiempo para su elaboración, así que os recomiendo anotarlo para un día en el que estéis inspirad@s 🙂

Y sin más preámbulo, !vamos a por la receta!

MOUSSAKA VEGETARIANA (con soja texturizada)

Para 6 personas

Dificultad: media

Tiempo de elaboración: 2 horas

Ingredientes:

Para el relleno:

  • 3 berenjenas medianas (680 gr)
  • 2 patatas (200 gr)
  • 100 gr de soja texturizada fina (1 vaso y medio aprox.)
  • 1/2 de cebolla mediana (100 gr)
  • 2 zanahorias (125 gr)
  • 1 pimiento rojo (120 gr)
  • 1 pimiento verde (100gr)
  • 2 tomates medianos
  • 2 dientes de ajo
  • 1/4 vaso de vino (50 ml )
  • 3 cucharadas de salsa de soja
  • 1 cucharada de azúcar
  • 1 cucharada rasa de harina
  • Sal, pimienta negra y orégano al gusto
  • Pan rallado para espolvorear por encima
  • Aceite de oliva

Para la bechamel:

  • 50 gr de harina
  • 37 ml de aceite de oliva (si utilizas mantequilla, necesitas la misma cantidad que de harina)
  • 600 ml de leche de arroz (puedes utilizar tu leche preferida)
  • Una pizca de pimienta negra y nuez moscada
  • Sal al gusto

Procedimiento:

Hidrata la soja. Para ello, vierte 3 vasos de agua en una cazuela y llévala a ebullición. Apaga el fuego, agrega la soja y tapa la cazuela. Hidrata durante 20 minutos. Pasado este tiempo, escurre el agua, deja que se enfríe y elimina todo el líquido que puedas de la soja con tus manos. Reserva.

Lava las berenjenas, sécalas y córtalas en rodajas longitudinales de medio centímetro de grosor. Añádeles sal y colócalas en un escurridor sobre otro recipiente, para que «suden» y pierdan el amargor. Déjalas así por 30 minutos.

Ásalas en una sartén con un poco de aceite. A mí me gusta cocinarlas bien para que queden tiernas . Ponlas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.

Pela las patatas y córtalas en rodajas (a lo largo), del mismo tamaño que las berenjenas (medio centímetro). Fríelas un poco en una sartén con abundante aceite, lo justo para que estén tiernas. Colócalas sobre papel absorbente para que pierdan el exceso de aceite. Reserva.

Prepara el relleno. Corta la cebolla, el pimiento y el ajo en brunoise. Pela y ralla la zanahoria. En una sartén grande sofríe la cebolla a fuego medio-bajo. Cuando empiece a estar transparente, agrega la zanahoria. Una vez estén tiernas, añade el pimiento. Finalmente, agrega el ajo muy picadito y la soja y mezcla todo bien durante unos 5 minutos.

Pela los tomates y ponlos en el vaso de la batidora, junto con el azúcar (para eliminar la acidez), el orégano, la sal, la pimienta y el vino. Mezcla bien y cocina durante 5 minutos. Agrega una cucharada de harina (para espesar el relleno), y deja cocer 5 minutos más. Retira del fuego.

Ahora vamos a montar nuestra moussaka. En una fuente, coloca una base de patatas. Sobre ella, otra capa de berenjenas (reparte toda la cantidad que tengas para dos capas). Vierte todo el relleno y cubre con otra capa de berenjenas.

Precalienta el horno a 180ºC.

Prepara la bechamel. En una sartén, calienta el aceite, agrega la harina y mezcla bien. Calienta un poco la leche y añade poco a poco, removiendo con unas varillas para evitar que se formen grumos. Remueve constantemente, añadiendo más leche a medida que se espesa la salsa. Repite el proceso hasta terminar con toda la leche. Añade la sal y las especias y mezcla bien.

Una vez tengamos la bechamel, vierte la salsa sobre el resto de ingredientes y espolvorea con pan rallado. Hornea unos 15-20 minutos, hasta que empiece a dorarse.

(Como podéis observar, la bechamel no es mi fuerte… Y la pinta de la moussaka tampoco es del otro mundo , pero…

después de 2 horas, esto es lo que te encuentras…

!A disfrutar!

Sugerencias:

  • Si te quedan grupos en la bechamel, utiliza la batidora y continua cocinando normal (yo la tengo que utilizar con frecuencia, ya que soy pésima con las salsas).
  • Si consumes lácteos, añade queso rallado sobre la bechamel en lugar de pan rallado y gratina.
  • Te recomiendo consumir la moussaka de un día para otro, ya que está más tomada.

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