Creo recordar que la primera vez que comí una crema de verduras fue en mi época universitaria: crema de calabacín. Había quedado con una amiga, se hizo tarde y me quedé a cenar con ella. Un calabacín, un poco de cebolla, unos quesitos, todo revuelto y «voilá». La siguiente vez que fui al pueblo, se la hice a mis padres para cenar. Después descubrí la crema de brócoli, en el restaurante Poney Pisador de Salamanca. Cómo me gustaba ese sitio…. No sé si seguirá abierto, pero si tenéis la oportunidad os lo recomiendo. El sitio era precioso, la comida casera de temporada y el precio muy asequible, al menos la última vez (hace una década, os aviso…). Ya tenía dos recetas…

Poco a poco empecé a experimentar y, a fecha de hoy, os puedo decir que van unas cuantas… Por supuesto, tengo mis favoritas, pero todas y cada una de ellas son especiales a su manera. Son un plato maravilloso para las noches de invierno, pero también como primer plato.

Hoy os traigo una receta muy curiosa: crema de lombarda y manzana. Contrariamente a lo que podáis pensar, tiene un sabor dulce, resultado de la cebolla y la manzana y un color espectacular. Os animo a probarla!

CREMA DE LOMBARDA Y MANZANA

Para 4 personas

Dificultad: muy fácil

Tiempo de preparación: 50 minutos

Ingredientes:

• 600 gr de col lombarda
• 200 gr de cebolla
• 300 gr de manzanas (3 manzanas grandes)
• 200 ml de leche de arroz (1 vaso)
• 1/2 cucharadita de comino
• Pimienta negra y sal al gusto
• Aceite

Procedimiento:

Corta la cebolla en juliana, la lombarda en tiras en tiras finas y las manzanas en cubos. Pon un poco de aceite en una cazuela y pocha la cebolla a fuego bajo. Cuando esté casi transparente, añade la lombarda, la sal, la pimienta y el comino y rehoga unos minutos. Después añade la manzana y rehoga de nuevo.

Añade un litro de agua (o hasta que cubra las verduras) y cuece hasta que esté tierna. Si tienes una olla rápida, este proceso será mucho más rápido. Escurre el agua y reserva en un recipiente, ya que iremos añadiendo este caldo para hacer nuestra crema. Añade el vaso de leche, un poco de agua y mezcla bien. Ve añadiendo poco a poco más caldo hasta conseguir la textura deseada.

Sirve decorada con unas almendras laminadas o unas rodajas de manzana deshidratada.

Sugerencias:

Si tomas lácteos, puedes usar nata (250ml), le da una cremosidad especial. También puedes utilizar el agua de cocción y añadir unos quesitos. Lo dejo a tu gusto.

Puedes añadir más o menos manzana para regular el sabor.